domingo, 2 de noviembre de 2008

Poniéndose al corriente

Mmmm... Muchas días, muchas cosas. Buenas y malas, pero principalmente bonitas. De reencontrarme, descubrirme y redescubrir mis valores y principios. De nuevas amistades y nuevos descubrimientos. Agradables y desagradables. De conocerme, de saber y validar mis principios. De saber q hay quienes son seres egoístas y no les importa nada. Penas... penas familiares. Ganas de escapar, de no parar, de no estarme quieta. De no permanecer acá ni un momento más. De necesidad de salir de acá. Días de exámenes médicos... que no tienen resultados... y de prescripciones que tienen que ver más que nada con un orden familiar que nunca se va a producir. Gritos que anulan mis oídos, silencios que hacen olvidar el cariño familiar. Arrancar y escapar, permanentemente. Ganas de asentarme, de poder conversar con alguien sobre ésto. De tener la confianza de poder conversarlo más allá de las superficialidades. Días de sonrisas, pese a todo. Porque cada mañana me da la oportunidad de levantarme con la esperanza que al salir de mi pieza algo haya cambiado.

No hay comentarios: