domingo, 31 de octubre de 2010

Las amigas quieren que a sus amigas les pasen cosas buenas

Y ojalá el universo, Dios o ese ser superior que se supone que existe las escuchara.
Esto me dijo una amiga contándome sus deseos para mi... y bueno, también después de llamarla en uno de esos momentos de fragilidad y cuando esas penas no te dejan respirar de tanto llorar.
A veces me canso. De esperar esas cosas buenas que no pasan.
Debería comenzar a pensar que, tal vez, sólo lo que se me presenta es lo mejor y lo más bueno a lo que puedo aspirar.
Y es entonces cuando me hastío... de estos momentos, mis pensamientos y en ocasiones de esos inciertos sentimientos.
De estar despierta y dormir también.
De las esperas eternas, de las nostalgias y ese desaliento que a veces me cubre.
De los desesperanzados y también de los que viven desesperados.
De esa sensibilidad, esa necesidad de sentir y sentir"te", y que a veces, sólo por un segundo, ese vacío tuyo también aburre.
Absurdo es que todo ésto igual me entretiene...el mirar, pero desde lejos todo lo que me aburre o cansa.
Así, mientras, sigo escondida... esperando que me pasen cosas buenas.

No hay comentarios: